Trastorno de pánico

En el último tiempo ¿has sentido un miedo o malestar intenso en cuestión de minutos? ¿Has experimentado palpitaciones, sudoración o sensación de ahogo de manera repentina? Entonces es probable que hayas experimentado un ataque de pánico.

¿Qué es un ataque de pánico? Miedo o malestar intenso repentino unido a pensamientos aprensivos acerca de que pueda repetirse el ataque.  La frecuencia es variable ya que se pueden experimentar distintas crisis en una semana y después pasar meses sin tenerlas. Además las personas que presentan un trastorno de pánico viven con ansiedad y alerta ante la aparición de un nuevo ataque, así como por la valoración que se hace de los posibles daños personales. 

Los síntomas más frecuentes de un ataque de pánico son:

• Palpitaciones, aumento de la frecuencia cardiaca.
• Sudoración.
• Temblores.
• Sensación de dificultad para respirar o de asfixia.
• Sensación de ahogo.
• Dolor o molestias en el tórax.
• Náuseas o malestar abdominal.
• Sensación de mareo, inestabilidad, aturdimiento o desmayo.
• Escalofríos o sensación de calor.
• Parestesias (sensación de entumecimiento o de hormigueo).
• Sensación de irrealidad o de estar separado de uno mismo.
• Miedo a perder el control o morir.

Si has experimentado algunos de estos síntomas con frecuencia y no entiendes el motivo o quieres que te ayudemos a identificarlo y controlarlo no dudes en ponerte en contacto con nosotros.